Metidas de pata

Ayer por la tarde terminé mi último curso de inglés en el nivel intermedio. La verdad es que me alegro mucho porque ya no voy a tener que ver a un par estudiantes que lo único que hacían era envenenar el ambiente. Los pobres "assholes" se dedicaban a otra cosa menos a tomar la clase o trabajar los ejercicios y tu dijeras bueno es que son una chingonería y tendrían que estar presentando el First Certificate, pero no! par de asnos.

En fin, no me detendré más platicando sobre estos individuos y pasaré a lo que quiero relatar. Pues como dije ayer fue mi último día de clases, yo llegué puntual al salón y cual fue mi sorpresa al sólo encontrar al profesor, por lo general ya todo mundo está adentro cuando yo llego, y éste estaba hecho un desastre porque apenas estaba calificando los examenes.

Yo le pregunté que por qué no lo había hecho antes a lo que contestó excusándose que tenía otros cuatro grupos en la escuela aparte del mio y daba clases en el Ejército. Quise contestarle algo como: y eso a mí qué?! Si no puedes ser profesor de tantos grupos, pues simplemente no lo seas. Si no sabes organizar todo el trabajo que tienes, deja entonces algunos de tus grupos para que no quedes mal. Pienso que es mejor decir algo como "si la verdad es que debí haber hecho tiempo o no debí pasar la noche anterior viendo la nueva serie "Private Practice" (jaja el comercial). Tuve que reservarme esos comentarios porque le prometí a mi madre no volver a faltarle al respeto a los maestros como lo hice en mis días de estudiante universitario. Sépase que ahí también me dieron la misma disculpa un maestro inútil que se llama Juan Miguel Zunzunegui con quien tuve muchos altercados que próximamente contaré.

Esto de poner excusas sobre lo que tenemos que hacer es sólo un mal pretexto. Mi hermano lo hace todo el tiempo siempre es culpa de alguien más excepto de él. Es todo un caso y casi siempre dramatiza y desespera a toda la familia. Creo que también puede ser tema para un post jaja. Yo casi siempre que me equivoco pues lo admito y de alguna manera trato de enmendarme como cocinando la comida favorita de aquél a quien ofendí, comprando un chuchuluco o una sincera disculpa.

Que tiene de malo cagarla de vez en cuando. Que no se supone que a través de las equivocaciones es como aprendemos, es decir, con la experiencia que obtuvimos metiendo la pata podemos reflexionar y guardarla en nuestro disco duro mental para no repetirlo.

Algunos piensan que pedir disculpas es signo de debilidad, admitir que si te doblas una vez la gente podrá pisotearte. Yo creo que mientras mas pedimos perdón más nos humanizamos.