Jeans ajustados

"Siempre que andas viviendo por tu cuenta bajas de peso, seguro te has de gastar el dinero en pura fiesta y alcohol". Estas son las palabras de mi padre que no confía en que su hijo vomita para tener una figura "esbelta". Digo, sí despilfarro el dinero, pero no lo hago en covers insulsos con cadeneros idiotas, o en botellas azules Johny Walker o en los diseños padrísimos de las cajetillas Camel.

Mi vicio son las compras. No al nivel de Isla Fisher en "Cofessions of a Shopaholic", pero si me gusta sentir esa sensación que te da cuando sales del la plaza con miles de bolsas en tus manos. Y al llegar a casa lloro porque me quedo sin cenar o me quedad prepararme mi sobre de gelatina de jerez. Pero ya decidí que uno de mis propósitos de año nuevo será administrar mejor mi dinero. Comprar cosas útiles, invertir en mi porvenir. Sino haré el intento jaja.

Por otro lado ahora que bajé de peso (como cuatro kilos) ya entro en mis jeans ajustados y me siento como Miranda Hobbes de "Sex and the City" contoneando la cadera jajaja. Siento que el gusto me durará lo mismo que me toma comerme una bolsa de "Kisses de Hersheys": nada.

En poco tiempo será mi cumple, luego que la navidad, el año nuevo y seguro mis cuatro kilos regresarán y con rebote. No importa!! Siempre puedo regresar a la vomitadas jajaja.