Hace poco fui a una fiesta. Era una reunión de amigos treintones en la que me sentí bastante incómodo y hasta fuera de lugar. Acepté ir porque no queria ir a casa y aburrirme viendo televisión, pero de haber sabido que me sentiría tan mal hubiera optado por ver a los hermanos Winchester.
Todo el ambiente me recordó la secundaria: música banda, salsas, cumbias hasta canciones de Selena hubo. Ya sé que se puede leer muy mamón que no es lo mio este tipo de música. pero es que hace mucho que la abandoné y que no me es grata.
Entonces todos los invitados presentes estaban entrados en sus conversaciones mientras que yo en un sillón cansado y aburrido degustaba de refresco dizque de manzana. Mi amigo iba de vez en cuando a ver como andaba pero la verdad sólo pensaba en cómo decir "estee... ya me voy... jeje".
Un tio me empezó a hacer conversación contando anécdotas de mi amigo en las que se encontraba en situaciones realmente embarazosas pero ni así me anime. Entonces recordé lo bien que me la pasaba cuando salía con mis amigos de Le petit.
Supongo que sólo me resta esperar, aunque las manecillas del reloj nunca paran.